El Desierto de la Tatacoa es una reserva de fósiles de más de 12 millones de años. los habitantes saben que allí, hace muchos millones de años, todo era un mar habitado por animales gigantes. Cuando se formaron las cordilleras, se fue el agua. Este desierto está localizado en el municipio de Villavieja, al norte del Huila, entre el río Magdalena y la cordillera oriental, la Tatacoa no es propiamente un desierto sino un bosque seco tropical, siendo la segunda zona árida más extensa de Colombia después de la península de la Guajira.
Lo maravilloso de esta zona son sus diferentes especies de cactus, además de como se pueden diferenciar las eras geológicas. En el suelo se puede observar un color rojizo compuesto de óxido de fósforo, hierro y cobre, en el amarillo sulfato y potasio y en el verde azufre. Su majestuoso cielo en donde se contempla una hermosa vista, un llamado Valle de las Constelaciones en donde se mezcla la aventura, el misterio, el amor y respeto a la naturaleza.
Un lugar de mitos como la Llorona, el Mohán, el Sombrerón, la Madremonte, curaciones milagrosas, experiencias místicas, avistamientos y el famoso Ovnipuerto.
En el 2008 los señores Alfredo Agudelo y José Antonio Londoño pidieron prestada dos hectáreas de terreno a la señora Orfanda Soto una habitante del desierto, con la idea de construir un helipuerto OVNI, ella cedió las hectarias porque dice que ha visto extrañas luces de colores que intentan bajar en las noches y que cree que son Ovnis. Los aficionados a la ufología provenientes de Medellín clavaron alrededor de 15 mil piedras blancas redondas invirtiendo 4 millones de pesos a este proyecto, trabajando en este lugareños e ingenieros. Luego aparecieron en el 2009 a presenciar el primer aterrizaje, según ellos. Don Alfonso Ramírez Olaya comenta: «Nos hicieron coger de las manos y sentarnos encima de las piedras. Era de noche. Todos teníamos que estar concentrados y uno escuchaba el ruido y lo que ellos hablaban con uno de los ufólogos. A ellos no se les entendía nada de lo que decían, mientras que don Alfredo les decía bienvenidos» el alcanzó a ver una enorme luz blanca y una extraña figura de aproximadamente 1.70 de largo y 3 metros de ancho en forma de círculo.
En mi opinión personal es un lugar hermoso, lleno de secretos y eventos que ocurren constantemente, para ir a conocer el Desierto se necesita tener bastante tiempo puesto que es extenso, nosotros fuimos tres días y no alcanzamos a visitar todo el lugar. Lo que más recomiendo es acampar para entrar en contacto con la magia que transmite la Tatacoa y si estas con suerte alcanzar a visualizar algo más allá de nuestro entendimiento.
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